El Perú enfrenta uno de los momentos más difíciles de su historia: el malestar social va acompañado de una crisis política, como resultado de los problemas acumulados durante muchos años. Desafortunadamente, nuestros líderes políticos no pueden manejar la situación de la mejor manera y de manera más pacífica. Pero tenemos que seguir trabajando ya que nuestra vida depende de nuestro trabajo y la mayoría de los peruanos estamos en la misma situación. Esperamos que la calma y la paz vuelvan a nuestras vidas y a nuestros hogares para estas próximas fiestas.